A veces se nos acerca gente a indagar sobre nuestro carro a vela, sobre todo cuando lo estamos montando o desmontando. Uno de los temas que causa mayor sorpresa, es cuando te preguntan por la velocidad y comentas que vas más rápido que el viento. Es en eso que dejas de quitar la arena pegada a las ruedas, intentas explicar lo que es el VIENTO APARENTE y descubres que por muchos ejemplos que pongas, tu interlocutor ya ha dado por hecho que nunca vas a poder ir más rápido que el viento. ( foto: Blackbird land-yacht )



Para entenderlo tenemos que diferenciar entre:
viento REAL, GENERADO y el APARENTE.



VIENTO REAL es el que podemos sentir cuando estamos quietos (como la palmera). Es la velocidad que el viento tiene por sí mismo en ese momento.





VIENTO GENERADO es el que provocamos al movernos.
Si vamos en coche un día sin viento y sacamos la mano por la ventanilla, nos daremos cuenta que el viento la empuja a cierta velocidad (la del coche en ese momento) y con una dirección, en este caso, contraria a la del vehículo, es un viento ‘fabricado’ al desplazarnos.




Para navegar con nuestro carrovela elegiremos un día en que el viento tenga cierta velocidad,  con lo cual ya tenemos un VIENTO REAL. Una vez subidos y estando en movimiento, nuestro carro va a 'fabricar' VIENTO GENERADO. Pues bien, la suma de los dos será el APARENTE.
Y mira por donde, cuanto más rápido vayamos, más viento generamos, con lo cual tendremos más viento aparente y con ello más velocidad.


¿Cómo sumamos el viento? Es lo que Sara de diez años me preguntó junto a su asombrado hermano Juan, que veía como el carro se convertía en un paquete. Como lo de la suma de vectores seguro no lo entendían, les hice agarrar un cabo por uno de los extremos y tirar de él en diferentes direcciones, mientras asido casi en el centro me dejaba llevar hacia la resultante de sus escasas fuerzas. Estuvimos cambiando de posición varias veces y creo, se fueron contentos y entendiendo como sumar fuerzas. Ahora les toca a sus progenitores sumar euros y comprarles un carro, seguro que así aprenden :-)


La experiencia la hora de navegar y elegir vela, nos permitirá multiplicar considerablemente la velocidad del viento. Como curiosidad las velas rígidas, pueden llegar a acrecentar por siete la velocidad del viento (de momento).